Entrevista a Pilar Nores de García en CPN Radio. Foto: ANDINA / Alberto OrbegosoLima.- Más del 80 por ciento de las familias beneficiadas por el programa Sembrando ya cuenta con cocina mejorada y letrina, lo cual le ha permitido mejorar sustancialmente su calidad de vida, sostuvo hoy la esposa del Jefe de Estado y presidenta de dicho programa, Pilar Nores de García.
Refirió que ello ocurre, por ejemplo, con el 80 por ciento de las familias atendidas en Cajamarca, el 87 por ciento en La Libertad y 81 por ciento en Amazonas, que son departamentos que registran poblaciones con altos índices de pobreza.
Destacó, asimismo, que el 97 por ciento en promedio de comunidades beneficiadas ya sabe utilizar eficientemente su cocina mejorada y letrina, lo que significa que las familias han entendido para qué lo hacen y van a darle sostenibilidad, además de cambiar sus hábitos en función de esto.
“Nosotros llevamos las partes y ellos construyen las cocinas y letrinas y habilitan su huerto. Ahora, ¿Qué hacen con eso? A veces hemos encontrado que otros servicios hechos por otras instituciones anteriores a nosotros dejaron de funcionar. Y acá vemos que, en promedio, el 97 por ciento de las comunidades utiliza la cocina y la letrina adecuadamente”, expresó.
Remarcó que en el tema de las cocinas mejoradas, se busca que estas ahorren energía en un 40 por ciento y para ello se les habilita un ‘codo’ de cerámica que hace que se reduzca el dióxido de carbono (CO2) en el ambiente.
Nores de García precisó que el ámbito de acción de Sembrando se focaliza en aquellas comunidades que viven en zonas altoandinas a partir de los 2 mil 500 metros sobre el nivel del mar, llegando incluso a las que habitan zonas de 5 mil metros de altitud.
“Se trata en realidad de caseríos aislados. Hemos puesto un límite entre 15 y 20 viviendas porque, debajo de esa cantidad, no vale la pena trabajar porque son casas secundarias, utilizadas en la temporada de cultivo”, dijo.
Afirmó que en las poblaciones excluidas de extrema pobreza, como las que atiende Sembrando, la única forma de intervención que garantiza la sostenibilidad en el tiempo es el desarrollo territorial.
“Esto implica hacer un programa de orden productivo y, a la vez, de orden social. Fijar las variables claramente e interrelacionar, porque las causas de los problemas son las mismas y tenemos que trabajar todas la variables a la vez. En Sembrando trabajamos con cinco de los Objetivos del Milenio: disminuir la pobreza extrema, la mortalidad infantil, la salud materna, la equidad de género y el medio ambiente”, manifestó en diálogo con CPN Radio.
La esposa del Primer Mandatario explicó que en términos productivos el trabajo es asociativo, mientras que en términos sociales la intervención es por familia.
Nores de García sostuvo que la metodología de Sembrando se basa en llevar conocimiento a todos los niveles, para lo cual se firman convenios con autoridades regionales y municipales, así como representantes de organismos públicos con los que se puede desarrollar alianzas estratégicas para mejorar la calidad de vida de las poblaciones altoandinas.
“Lo que intentamos es dejar todas las capacidades en las propias autoridades institucionalizadas, a nivel de los Ministerios de Educación, Salud, entre otros. En segundo lugar, trabajamos con la fuerza de la comunidad y de las propias autoridades, capacitando a maestros de las escuelas primarias, al personal de posta de salud, en fin a todas las fuerzas vivas”, anotó.
Comentó que este enfoque es tan novedoso que las Naciones Unidas ha encargado a una consultora internacional un estudio para sistematizar el programa de ayuda social peruano, es decir, poner en ‘blanco y negro’ cuáles son los pasos fundamentales y cuál es la teoría fundamental para que otros países puedan imitar este modelo de trabajo conjunto.
Fiscalización
En otro momento, Nores de García afirmó que para evitar cualquier suspicacia sobre la fiscalización de las donaciones con los que trabaja Sembrando, ha pedido a la Contraloría General de la República que, dentro de sus atribuciones, pueda hacer una revisión de cuentas.
Precisó también que muchas de las instituciones que dan fondos hacen sus propias auditorías y, en lo que respecta a Sembrando, han expresado hasta el momento su conformidad con la labor realizada.
“Otras instituciones hacen una evaluación de nuestra institución antes de otorgar una donación, como es el caso de Bill y Melinda Gates Fundation, que contrató a una consultora internacional como KPMG de indudable prestigio internacional para hacer una evaluación de Sembrando. Tal debe haber sido positiva esa evaluación que la citada fundación aprobó una donación de 5 millones de dólares a Sembrando para ser gastado en tres años”, manifestó.
Tras lamentar los comentarios que quieren poner en duda la transparencia del manejo de fondos en Sembrando, señaló que eso no debe llevar a perjudicar una labor que viene beneficiando hasta el momento a unas 45 mil familias de las zonas más pobres del país. (Fuente: Andina)
Destacó, asimismo, que el 97 por ciento en promedio de comunidades beneficiadas ya sabe utilizar eficientemente su cocina mejorada y letrina, lo que significa que las familias han entendido para qué lo hacen y van a darle sostenibilidad, además de cambiar sus hábitos en función de esto.
“Nosotros llevamos las partes y ellos construyen las cocinas y letrinas y habilitan su huerto. Ahora, ¿Qué hacen con eso? A veces hemos encontrado que otros servicios hechos por otras instituciones anteriores a nosotros dejaron de funcionar. Y acá vemos que, en promedio, el 97 por ciento de las comunidades utiliza la cocina y la letrina adecuadamente”, expresó.
Remarcó que en el tema de las cocinas mejoradas, se busca que estas ahorren energía en un 40 por ciento y para ello se les habilita un ‘codo’ de cerámica que hace que se reduzca el dióxido de carbono (CO2) en el ambiente.
Nores de García precisó que el ámbito de acción de Sembrando se focaliza en aquellas comunidades que viven en zonas altoandinas a partir de los 2 mil 500 metros sobre el nivel del mar, llegando incluso a las que habitan zonas de 5 mil metros de altitud.
“Se trata en realidad de caseríos aislados. Hemos puesto un límite entre 15 y 20 viviendas porque, debajo de esa cantidad, no vale la pena trabajar porque son casas secundarias, utilizadas en la temporada de cultivo”, dijo.
Afirmó que en las poblaciones excluidas de extrema pobreza, como las que atiende Sembrando, la única forma de intervención que garantiza la sostenibilidad en el tiempo es el desarrollo territorial.
“Esto implica hacer un programa de orden productivo y, a la vez, de orden social. Fijar las variables claramente e interrelacionar, porque las causas de los problemas son las mismas y tenemos que trabajar todas la variables a la vez. En Sembrando trabajamos con cinco de los Objetivos del Milenio: disminuir la pobreza extrema, la mortalidad infantil, la salud materna, la equidad de género y el medio ambiente”, manifestó en diálogo con CPN Radio.
La esposa del Primer Mandatario explicó que en términos productivos el trabajo es asociativo, mientras que en términos sociales la intervención es por familia.
Nores de García sostuvo que la metodología de Sembrando se basa en llevar conocimiento a todos los niveles, para lo cual se firman convenios con autoridades regionales y municipales, así como representantes de organismos públicos con los que se puede desarrollar alianzas estratégicas para mejorar la calidad de vida de las poblaciones altoandinas.
“Lo que intentamos es dejar todas las capacidades en las propias autoridades institucionalizadas, a nivel de los Ministerios de Educación, Salud, entre otros. En segundo lugar, trabajamos con la fuerza de la comunidad y de las propias autoridades, capacitando a maestros de las escuelas primarias, al personal de posta de salud, en fin a todas las fuerzas vivas”, anotó.
Comentó que este enfoque es tan novedoso que las Naciones Unidas ha encargado a una consultora internacional un estudio para sistematizar el programa de ayuda social peruano, es decir, poner en ‘blanco y negro’ cuáles son los pasos fundamentales y cuál es la teoría fundamental para que otros países puedan imitar este modelo de trabajo conjunto.
Fiscalización
En otro momento, Nores de García afirmó que para evitar cualquier suspicacia sobre la fiscalización de las donaciones con los que trabaja Sembrando, ha pedido a la Contraloría General de la República que, dentro de sus atribuciones, pueda hacer una revisión de cuentas.
Precisó también que muchas de las instituciones que dan fondos hacen sus propias auditorías y, en lo que respecta a Sembrando, han expresado hasta el momento su conformidad con la labor realizada.
“Otras instituciones hacen una evaluación de nuestra institución antes de otorgar una donación, como es el caso de Bill y Melinda Gates Fundation, que contrató a una consultora internacional como KPMG de indudable prestigio internacional para hacer una evaluación de Sembrando. Tal debe haber sido positiva esa evaluación que la citada fundación aprobó una donación de 5 millones de dólares a Sembrando para ser gastado en tres años”, manifestó.
Tras lamentar los comentarios que quieren poner en duda la transparencia del manejo de fondos en Sembrando, señaló que eso no debe llevar a perjudicar una labor que viene beneficiando hasta el momento a unas 45 mil familias de las zonas más pobres del país. (Fuente: Andina)
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