Gina Gabriela Ascarrunz en foto de archivo. Víctima de una mal aplicada orinoterapia (foto Sonico)Una modelo de 35 años edad, murió debido a una septicemia, que le habría provocado una amiga suya, tras inyectarle orina al suero que se le aplicaba mientras se la preparaba para una operación.
Gina Ascarrunz ingresó a la clínica Incor el miércoles, tras ser derivada del Seguro Universitario con diagnóstico de abdomen agudo. Habría sido operada en Chile, donde le pusieron grapas para reducir el tamaño de su estómago.
En la clínica boliviana, su padre descubrió in fraganti que la amiga de su hija, Mónica Schutt, quien aparentemente es diseñadora de modas, le colocaba orina en el torrente sanguíneo.
El fiscal asignado al caso, Óscar Flores, aclaró que la paciente recibió la orina a través del suero que tenía puesto, y que era preparada por los cirujanos de ese nosocomio para una operación de abdomen.
Agregó el fiscal Flores que de acuerdo con las pesquisas preliminares, Schutt le inyectaba orina a su amiga para practicar la orinoterapia. “Seguramente quería que se sienta mejor de salud, por que ya antes tuvo una complicación”.
Aclaró que “cuando se intentó hacer una autopsia, ya habían formolizado su cuerpo y así es imposible hallar cualquier otro tipo de sustancia que haya estado en él”.
Por su parte, Jaime Soliz, fiscal de distrito de Santa Cruz, explicó al diario La Razón, que cuando Ascarrunz llegó a la clínica, los médicos decidieron operarla. “Cuando le practicaron la incisión, identificaron un cuadro de septicemia. Se complicó la intervención quirúrgica y falleció el viernes”.
Ambos fiscales coincidieron en que la indagación que desarrollan es de oficio porque los familiares no colaboran en su trabajo.
“La denuncia fue realizada a través de una llamada anónima”, indicó Flores. Por su lado, Soliz aseguró que “los familiares no están colaborando para esclarecer la muerte” de la mujer.
La amiga de la víctima y supuesta responsable fue citada a declarar, “sin embargo, no ha sido ubicada y los policías la están buscando” agregó Flores.
La orinoterapia es una práctica no científica ni legal que refiere las muchas aplicaciones de la orina humana para propósitos curativos o cosméticos, incluido beber la orina propia o aplicarla a la piel.
El médico familiar Emilio Fernández aclaró que no es igual beber la orina que inyectarla a la sangre. Cuando se la bebe se la elimina como cualquier líquido, pero tenerla en la sangre es fatal.
Gina Ascarrunz ingresó a la clínica Incor el miércoles, tras ser derivada del Seguro Universitario con diagnóstico de abdomen agudo. Habría sido operada en Chile, donde le pusieron grapas para reducir el tamaño de su estómago.
En la clínica boliviana, su padre descubrió in fraganti que la amiga de su hija, Mónica Schutt, quien aparentemente es diseñadora de modas, le colocaba orina en el torrente sanguíneo.
El fiscal asignado al caso, Óscar Flores, aclaró que la paciente recibió la orina a través del suero que tenía puesto, y que era preparada por los cirujanos de ese nosocomio para una operación de abdomen.
Agregó el fiscal Flores que de acuerdo con las pesquisas preliminares, Schutt le inyectaba orina a su amiga para practicar la orinoterapia. “Seguramente quería que se sienta mejor de salud, por que ya antes tuvo una complicación”.
Aclaró que “cuando se intentó hacer una autopsia, ya habían formolizado su cuerpo y así es imposible hallar cualquier otro tipo de sustancia que haya estado en él”.
Por su parte, Jaime Soliz, fiscal de distrito de Santa Cruz, explicó al diario La Razón, que cuando Ascarrunz llegó a la clínica, los médicos decidieron operarla. “Cuando le practicaron la incisión, identificaron un cuadro de septicemia. Se complicó la intervención quirúrgica y falleció el viernes”.
Ambos fiscales coincidieron en que la indagación que desarrollan es de oficio porque los familiares no colaboran en su trabajo.
“La denuncia fue realizada a través de una llamada anónima”, indicó Flores. Por su lado, Soliz aseguró que “los familiares no están colaborando para esclarecer la muerte” de la mujer.
La amiga de la víctima y supuesta responsable fue citada a declarar, “sin embargo, no ha sido ubicada y los policías la están buscando” agregó Flores.
La orinoterapia es una práctica no científica ni legal que refiere las muchas aplicaciones de la orina humana para propósitos curativos o cosméticos, incluido beber la orina propia o aplicarla a la piel.
El médico familiar Emilio Fernández aclaró que no es igual beber la orina que inyectarla a la sangre. Cuando se la bebe se la elimina como cualquier líquido, pero tenerla en la sangre es fatal.
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