Congresista Luis Gonzales Posada.
A 203 asciende el número de efectivos de la Policía Nacional muertos en los últimos siete años en cumplimiento de su deber, reveló el congresista Luis Gonzales Posada, quien los consideró héroes nacionales por ser “el escudo blindado de la democracia”.
“Los policías son un escudo blindado de la democracia porque nos protegen de la delincuencia, el narcotráfico y el terrorismo. Ya son 203 efectivos muertos entre los años 2002 y 2008, y una alianza firme con la sociedad impedirá que el número aumente”, expresó en declaraciones a la agencia Andina.
“Los policías son un escudo blindado de la democracia porque nos protegen de la delincuencia, el narcotráfico y el terrorismo. Ya son 203 efectivos muertos entre los años 2002 y 2008, y una alianza firme con la sociedad impedirá que el número aumente”, expresó en declaraciones a la agencia Andina.
Agregó que también decenas de policías quedaron inválidos, discapacitados y con diversos tipos de secuelas por la sacrificada labor que llevan a cabo en beneficio de la sociedad civil en su conjunto.
Por tal motivo, deploró el fallecimiento de dos custodios del orden durante un desalojo de invasores del Santuario Histórico Bosque de Pómac, en Lambayeque, cuando solo cumplían un acto propio de sus funciones constitucionales.
Formuló, en ese sentido, un llamado a las autoridades fiscales y judiciales para determinar quiénes son los responsables del hecho y aplicarles la pena más severa.
“Aquí hay un concurso de delitos, y el de mayor gravedad es el de terrorismo, cuyas penas máximas de cárcel son 35 años y hasta cadena perpetua”, mencionó.
Gonzales Posada refirió que los dos policías muertos en Lambayeque se suman a los 21 fallecidos en el año 2002, 19 en el 2003, 25 en el 2004, 55 en el 2005, 27 en el 2006, 35 en el 2007, y 21 en el 2008 entre oficiales, suboficiales y especialistas.
Por tal motivo, deploró el fallecimiento de dos custodios del orden durante un desalojo de invasores del Santuario Histórico Bosque de Pómac, en Lambayeque, cuando solo cumplían un acto propio de sus funciones constitucionales.
Formuló, en ese sentido, un llamado a las autoridades fiscales y judiciales para determinar quiénes son los responsables del hecho y aplicarles la pena más severa.
“Aquí hay un concurso de delitos, y el de mayor gravedad es el de terrorismo, cuyas penas máximas de cárcel son 35 años y hasta cadena perpetua”, mencionó.
Gonzales Posada refirió que los dos policías muertos en Lambayeque se suman a los 21 fallecidos en el año 2002, 19 en el 2003, 25 en el 2004, 55 en el 2005, 27 en el 2006, 35 en el 2007, y 21 en el 2008 entre oficiales, suboficiales y especialistas.
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