Perú acepta el asilo otorgado por Nicaragua a Alberto Pizango

Jefe del Estado, Alan García, inspecciona obras en la Costa Verde.Foto:ANDINA / Juan Carlos Guzmán Negrini.

Lima- El jefe del Estado, Alan García, afirmó hoy que el Gobierno peruano acepta la decisión de Nicaragua de otorgar asilo a Alberto Pizango, pese a considerar que el líder indígena tuvo “una actuación criminal” en los hechos de violencia ocurridos en la ciudad de Bagua.
“Como país democrático aceptamos, y está en nuestra Constitución que la calificación la hace el país que concede el asilo. Si Nicaragua considera que el señor Pizango es una persona que merece el asilo porque no tiene las condiciones de juicio justo, pues hay que reconocerlo, aunque no le guste a uno o a otro”, manifestó.
Ratificó, sin embargo, que antes del asilo nicaragüense, Pizango recibió la negativa de tres países de la región porque sus respectivos gobiernos consideraron que en Perú existen condiciones para que haya un juicio justo a las personas.
En todo caso, consideró “bueno” que el Ministerio Público denuncie a Pizango, ex presidente de la la Asociación Interétnica para el Desarrollo de la Selva Peruana (Aidesep), por su responsabilidad en la jornada de protesta que provocó las muertes de policías y nativos.
“Esa es una actuación criminal en mi concepto, y creo que ha hecho bien la Fiscalía de la Nación en denunciar actos porque no se puede instigar o engañar (…) Es una forma criminal de empujar a la muerte y a la violencia a personas porque se tiene la responsabilidad del asesinato de 24 policías”, subrayó.
Sobre los esfuerzos del Gobierno para solucionar las protestas indígenas contra el Decreto Legislativo 1090, que consideran lesivo a sus intereses en territorio selvático, el mandatario adelantó que “en el momento oportuno” viajará a la zona.
Aclaró, no obstante, que primero debe recorrerse los caminos establecidos por la democracia, como el debate en el Congreso para modificar la norma, la actuación del Tribunal Constitucional en declarar su inconstitucionalidad, o una mesa de diálogo multisectorial.
“En el momento oportuno estaré. Ahora creo que hay camino para buscar puntos de contacto a los que, en ningún caso, yo me niego ni el Gobierno se niega, siempre y cuando se respete la autoridad democrática”, declaró.
Del mismo modo, el dignatario justificó que el Gobierno difunda un spot mostrando la manera en que fueron asesinados 24 policías, para demostrar “el nivel de salvajismo” con el que mataron a los efectivos del orden que trataron de dialogar para acabar con la violencia.
Criticó que algunas agencias internacionales informaran que la intervención policial en Bagua, Región Amazonas, haya provocado “un genocidio”, lo cual es absolutamente equivocado porque los números revelan que la mayor cantidad de muertos son policías.
Por otro lado, el presidente García reiteró que en los hechos de violencia existió influencia externa porque antes de la jornada de protesta, en la Región Puno, se realizó un congreso indígena, con representantes de varios países, que llamaron a la insurgencia.
Añadió que al mismo tiempo, “el gobernante de un país cercano y vecino”, enviaba mensajes incandescentes respecto a la conducción de nuestras naciones por las etnias indígenas y aborígenes.
“Sí es evidente que hubo presión. No nos engañemos que en nuestro continente hay dos orientaciones: la democracia con modernidad, inversión y trabajo; y el estatismo de viejo cuño que en ese camino destruye libertades y unifica el poder en torno a una o dos personas”, dijo.
A pesar de ello, descartó la idea de romper relaciones con aquellas naciones porque hay ciudadanos peruanos en esos países, así como ciudadanos extranjeros en territorio peruano.
“Lo mejor es no meterse en político de otro lugar y ocupémonos de lo nuestro (…) Parece que algunos entienden la globalización como el derecho de opinar y meterse en la política de países vecinos, y eso es muy lamentable”, puntualizó.
El mandatario formuló estas declaraciones luego de supervisar las obras de mejoramiento del circuito de playas de la Costa Verde, donde estuvo acompañado por la ministra de Vivienda, Nidia Vílchez; el alcalde San Miguel, Salvador Heresi; y el burgomaestre de Magdalena, Francis Allison. (Fuente: Andina)