El robo con agresión fue registrado por cámaras de seguridad del municipio y salió a la luz pública el 26 de mayo. Foto: Peru.com
Iquique.- Luego de ser atacado por siete pandilleros en la ciudad chilena de Iquique, las autoridades lograron dar con el paradero de la víctima peruana, Pablo Saca (48), quien la madrugada del 1 de mayo sufrió el ataque.
El robo con agresión fue registrado por cámaras de seguridad del municipio y salió a la luz pública el 26 de mayo.
Sin embargo, la identidad del agredido era desconocida, puesto que tras ser auxiliado por Carabineros, los policías no dejaron constancia del hecho.
Tal situación, incluso, provocó la destitución de un suboficial y un cabo primero de la institución, quienes fueron separados de la policía por faltar a sus deberes.
Además, con la desaparición de la víctima y pese al reconocimiento de los autores del ilícito, la fiscalía no podía actuar debido a la ausencia del afectado.
Saca reconoció que no quiso estampar la denuncia debido a que en el Perú las golpizas quedan impunes o los acusados después buscan venganza.
"Estoy sorprendido de la rigurosidad de la policía chilena y no sé cómo lograron encontrarme", indicó el ciudadano peruano a un diario chileno, según constata terra.cl.
En tanto, los siete agresores ya están identificados y la fiscalía sólo le falta la denuncia respectiva para emitir una orden de captura. (Fuente: La Tercera/Peru.com)
Iquique.- Luego de ser atacado por siete pandilleros en la ciudad chilena de Iquique, las autoridades lograron dar con el paradero de la víctima peruana, Pablo Saca (48), quien la madrugada del 1 de mayo sufrió el ataque.
El robo con agresión fue registrado por cámaras de seguridad del municipio y salió a la luz pública el 26 de mayo.
Sin embargo, la identidad del agredido era desconocida, puesto que tras ser auxiliado por Carabineros, los policías no dejaron constancia del hecho.
Tal situación, incluso, provocó la destitución de un suboficial y un cabo primero de la institución, quienes fueron separados de la policía por faltar a sus deberes.
Además, con la desaparición de la víctima y pese al reconocimiento de los autores del ilícito, la fiscalía no podía actuar debido a la ausencia del afectado.
Saca reconoció que no quiso estampar la denuncia debido a que en el Perú las golpizas quedan impunes o los acusados después buscan venganza.
"Estoy sorprendido de la rigurosidad de la policía chilena y no sé cómo lograron encontrarme", indicó el ciudadano peruano a un diario chileno, según constata terra.cl.
En tanto, los siete agresores ya están identificados y la fiscalía sólo le falta la denuncia respectiva para emitir una orden de captura. (Fuente: La Tercera/Peru.com)
No hay comentarios:
Publicar un comentario